Ante la situación por la que atraviesa Agustín, debido a que está en prisión en espera de la resolución de su juicio en tribunales, intenta convencerlo de que debe corregir su vida y cambiar su forma de pensar. Todo tiene remedio, menos la muerte. Insiste en que debe trabajar. Se equivoca al sostener que el derecho constitucional de nada sirve, ya que en el país no hay garantías, sólo hechos consumados: "¿Dónde está Lerdo, autor de la funesta escuela que enseña: que el hecho prevalece sobre el derecho, y que contra los hechos consumados no hay remedio? ¿No consumó su reelección a fuerza de iniquidades y de inmoralidad? ¿Y de que le sirvió todo? Come el pan amargo del destierro, y su reelección, efecto de las funestas y torpes teorías, que tu repites, se disipó como el humo". Cree que Agustín pronto estará en libertad y espera que abandone las ideas equivocadas que han provocado su perdición. |
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Palabras clave |
Juicio, Prisión, Derecho constitucional, Reelección, Sebastián Lerdo de Tejada, Destierro |