Recibió 128 páginas que le faltaban del 2º tomo de los Apuntes sobre los fueros y tribunales militares. Considera injusto que, por completar el tomo que le obsequió, quede trunco otro; de ahí que le pregunte el precio para mandarle el dinero. Le causa una impresión dolorosa el rudo trabajo al que se consagra Gutiérrez, viniendo a su memoria unos versos de Juvenal (Sátira XII, versos 48-51) y de [Quinto] Horacio [Flaco] (Epistolarum, liber I, epístola I, versos 13-19), los cuales copia para que los tome como programa a seguir. Agrega: "Poco hemos de vivir porque pasamos de los cincuenta años; vida larga para nuestro país; procuremos que los últimos días de nuestra existencia sean agradables; y si esto no fuera posible, quitémosle el mayor número de incomodidades, en cuanto de nosotros dependa". Se despide deseando que se declare fiel discípulo de la amable filosofía de Horacio. |