972 / Ms. 1249 / 1876-08-29 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel Para: CEBALLOS, Lorenzo María
Insiste en afirmar que Ceballos no debe regresar a México. Solicita decir a Ortiz que "luego que pase el equinoccio" vuelva a su casa de México, pues sigue padeciendo lo mismo en Europa y ante eso prefiera sufrir en su casa "por tener más comodidad y baratura." Envía un ejemplar de El Siglo XIX y uno de El Monitor, por la importancia de unos remitidos; habla del impacto de su discurso [Discurso pronunciado por el C. magistrado Ezequiel Montes el día 7 de agosto de 1876 en la Suprema Corte de Justicia, sobre el amparo promovido por el C. Manuel Blanco]. En cuanto a la insurrección, se presenta en todo el país. En lo constitucional, el presidente de la Suprema Corte (vicepresidente de la República) está dispuesto a desconocer la usurpación del poder público y la fuerza armada está firme en sostener al vicepresidente; la Cámara de Diputados resuelta a declarar la inexistencia de elecciones federales; en fin, triunfará la legalidad constitucional. Los franceses tuvieron razón al definir a México como "El país de lo imprevisto," en alusión a la rapidez con que cambian las escenas políticas: "En principio de este mes era cosa resuelta la acusación del presidente de la Corte Suprema de Justicia y de los cinco magistrados, que con él votamos; y se deja entender que también estaba resuelta su destitución; y hoy el presidente de la Corte representa las esperanzas legítimas de nuestra patria, y se le considera como presidente inevitable de la República en primero de Diciembre próximo: los delitos políticos son una verdadera invención de la tiranía".
1033 / Ms. 1250 / 1876-12-06 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel Para: IGLESIAS, José María
Reseña sus oficios para llegar a un acuerdo entre Porfirio Díaz e Iglesias [respecto a la elección presidencial]; como no obtuvo resultados favorables y puesto que él es un partidario de la legalidad constitucional, ha decidido abandonar la ciudad. Promete hacerle saber dónde se pondrá a sus órdenes.