Reitera el contenido de la carta enviada el 26 de julio [véase núm. 3533] en la que manifiesta que la licencia solicitada pasó a la Suprema Corte, por ser ésta o su presidente los únicos autorizados para determinar lo conveniente, según los capítulos 1º y 3º del reglamento de 29 de junio de 1862. |