Calumnia

54 / Ms. 1246 / 1873-07-20 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: FERNÁNDEZ, Justino
Explica las causas de su derrota electoral: la calumnia de Silviano Gómez, quien dijo que él intentó comprar el voto de los electores, cuya prueba era un préstamo de Montes a su amigo Alejandro García y a otra persona, así como su aportación a favor de la instrucción primaria y de los artesanos organizados de Huichapan. Desmiente dicha acusación, pues no es partidario de usar tales métodos, sobre todo cuando ha sido víctima de intrigas: "en julio de 1871, Benito Juarez envió a Eugenio Barreiro a Huichapan con autorización de gastar hasta $20,000.00 para que se eligiera diputado propietario a otra persona que no fuera yo, y en 1872, Cervantes envió a dos agentes con el mismo objeto".

81 / Ms. 1246 / 1873-08-11 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: GARCÍA, Alejandro
Solicita aclare lo sucedido en las elecciones, en las cuales la candidatura de Montes salió derrotada, en particular por los rumores relativos a que éste repartió dinero para comprar a los electores, todo ello originado en una deuda de Montes con García. Como éste bien sabe, esto es una vil calumnia. Asimismo, pregunta lo siguiente: qué pasó con los ocho electores de Chapantongo que García tenía en su casa cuyos votos, con los de los 21 de Tecozautla más el de García, darían la victoria; "¿30 son la mayoría absoluta de 54, número total de electores que hizo la elección, y que pasó con el resto de electores?"; la razón por la cual García exigió a los electores de Tecozautla retirarse de Huichapan, ya que retirándose cometieron un delito castigado por el artículo 2o. de la ley del 8 de mayo de 1871. La respuesta disipará las dudas.

654 / Ms. 1248 / 1875-05-23 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: MONTES, Agustín
Agradece el aviso sobre la hostilidad de los indígenas de las rancherías cercanas a Taxhidó hacia las obras que se propone hacer. Éstos seguirán bañándose "de balde" en dicho lugar, pues jamás ha tenido la intención de cobrar a "gentes tan infelices como las que habitan aquella comarca". Lo autoriza a propagar esto y a visitar a Clemente [F.] Díaz para que éste también desmienta tales calumnias. Recomienda que visite a los autores de las calumnias, a fin de enterarse en qué fundan su malevolencia. Por último expresa pesar por la desgracia de [Gabriel] Aguillón [no menciona de qué se trata].

923 / Ms. 1249 / 0000-00-00 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES REBOLLAR, Agustín  Para: , Sin destinatario
Anotación de la declaración de Agustín Montes en el juicio que se le sigue por una pelea que tuvo con Epigmenio Cumplido. "En... del mismo, presente D. A. Montes, le notifiqué la sentencia anterior y dijo: que suplica al juzgado se sirva mandar a la Sría. que le expida copia certificada, a costa del respondente: primero, de las declaraciones del que habla, de la Delgado, de Cumplido y de Úrsula Ortega mesera del café El Progreso; segundo, de lo que Cumplido ha llamado ampliación de su declaración en la que pretendió torpemente retractar las especies verdaderas que emitió ante el juzgado en 19 de Junio último; e insultar con groseras calumnias al que responde; y tercero, de la sentencia que se le ha hecho saber, y firmó".

1160 / Ms. 1250 / 1877-01-23 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: GARCÍA, Alejandro
Deja a su criterio entregar la carta adjunta [sobre la candidatura a diputado de Agustín Montes, véase núm. 1159]. Tomó como calumnias lo que han dicho sobre García, igual que sobre Félix Anaya, pues su amistad está fuera de dudas. Pide que conteste su carta del 21 [acerca de las elecciones, véase núm. 1150].

1199 / Ms. 1250 / 1877-02-12 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: TINAJERO, Fernando
Desempeñó los encargos que le hizo en su carta del 9 de enero. El gobernador Manuel Ayala contestó favorablemente, pero si supieran quién firma el artículo, se acabarían las calumnias.

1673 / Ms. 1252 / 1878-07-08 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: RAMÍREZ, Ignacio
Necesita arreglar un asunto que tiene pendiente con Ramírez, que se refiere a que en la audiencia del 5 de julio, Ramírez manifestó ante el tribunal pleno de la Suprema Corte de Justicia: "Que el magistrado Montes apoyó la tiranía de Comonfort", lo cual es una calumnia, porque tal tiranía consistió en el golpe de Estado del 17 de diciembre de 1857; jamás apoyó dicho golpe, al contrario, fue el único ministro de Estado que habló y votó en contra de la resolución del Poder Ejecutivo que conllevaba la disolución del Congreso. Tan cierto es esto, que dimitió la cartera de Justicia y que en el arreglo del Congreso Constituyente con Comonfort, se decidió que volviera al Ministerio de Justicia por ser el único ministro que merecía la confianza del Congreso. Añade: "Reservo mi derecho para vindicarme de la calumnia con que me has atacado, cuando lo crea conveniente. Por ahora quiero vengarme de tu mala acción; y al efecto, voy a presentarte los medios de que te libres de incurrir en una grande indignidad". El 28 de febrero de 1861, cuando Ramírez usurpó el Poder Legislativo contra los arts. 50 y 128 de la Constitución, promulgó un decreto que dice: "Todos los tribunales y juzgados de la federación, distrito y territorios, fundarán en ley expresa sus sentencias definitivas, determinando con claridad en la parte resolutiva cada uno de los puntos controvertidos". Enseguida pregunta: "¿En qué ley expresa funda el presidente del Tribunal Superior de Puebla la sentencia en que desechó la recusación interpuesta por el Lic. Valdés Caraveo". Responde que en ninguna, pues Valdés fundó su recusación en el art. 135 de la ley del 4 de mayo de 1857 que dice: "Las partes podrán recusar sin causa a un magistrado del Tribunal Superior en cada instancia". Además de este fundamento, cita a Gonzalo Suárez de Paz (Praxis ecclesiastica, secunda annotatione, De instantia, núm. 6. Madrid, 1760), a Juan de [Hevia] Bolaños (Curia filipica, primera parte, parraf. 9, núm. 1) y a [Manuel de la] Peña y Peña (Lecciones de práctica forense mexicana, tomo 1º, lec. 2ª, núm. 1, pág. 11); antecedentes que demuestran que el presidente del Tribunal Superior de Puebla fue recusado en tiempo hábil por parte de Antonio Rosales, representado por Valdés Caraveo. Para demostrar que la jurisdicción de dicho presidente quedó suspensa desde el momento en que conoció la recusación, cita al jurisconsulto español [Pedro] Murillo Velarde (Cursus iuris canonici hispani et indici, &. lib. 2º, Decretatium, tit. 28, núm. 286), deduciendo que el presidente aludido no es la autoridad competente de que habla el art. 16 de la Constitución federal al pronunciar sentencia definitiva contra la cual pedía amparo Antonio Rosales. Advierte a Ramírez: "La filosofía del derecho no te permite decir que tu ley habla de tribunales federales, de jueces y tribunales del Distrito Federal y territorios; porque la razón en todos es una misma: quisiste sustituir el arbitrio judicial con la aplicación de la ley expresa". Por último, dice: "Tú eres una especie de Centauro Quirón, que según [Nicolás] Maquiavelo: "erov [uno] mezzo uomo é mezzo bestia": tú te compones de Ignacio Ramírez y del Nigromante. ¿Domina en tu ser Ramírez? Obrarás de acuerdo con tu teoría de 28 de Febrero de 1861. ¿Domina el Nigromante? Obrarás en contra de tu propia doctrina". Aunque Ramírez emplee su lengua viperina para calumniarlo, se vengará como lo hace en esta carta, pero "seré tu compañero y amigo, que te quiere bien, aun cuando te domina el Nigromante".

3028 / Ms. 1255 / 1881-04-22 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: ZAMACONA, Manuel María de
Leyó con pesar la carta del 5 de abril y copia de la nota que con 14 documentos dirigió a la Secretaría de Relaciones Exteriores. Concuerda con Zamacona en que el rencor y la malevolencia han hecho su oficio, pero dado que el presidente [Manuel González] está mal aconsejado, es necesario que envíe al Heraldo un remitido en que categóricamente desmienta la calumnia que le imputó el reportero del Cincinnati Gazette y que remita al presidente y a él ejemplares de El Heraldo en que aparezca publicado lo anterior; de este modo quedará en libertad de permanecer en su puesto diplomático o regresar a México.

3086 / Ms. 1255 / 1881-05-03 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: CRAVIOTO, Simón
Está en espera del aviso de Cravioto sobre el resultado de las indicaciones de Montes dirigidas a la Administración de Rentas de Huichapan, relativas al expediente de embargo del rancho de Tziquia. El promotor fiscal del Juzgado de distrito del estado de Hidalgo [Arturo Martínez Cáceres] confirmó que el jefe político del distrito de Huichapan [Francisco Limón] es cómplice de los monederos falsos. Por consiguiente, Limón debe ser separado de su cargo. Montes manda decir al Gral. [Rafael] Cravioto que los monederos falsos afirman que éste protege su empresa criminal; sin embargo reputa esto como una calumnia y ordenó al promotor fiscal guardar las consideraciones debidas a la alta investidura que ha tenido en el Estado el Sr. Cravioto, a su rango de general en el Ejército y a su cargo de senador por el Estado de Puebla. Está cierto que el general no hará causa común con los presuntos reos, sino que dejará a la justicia federal obrar libremente. Finalmente solicita a Simón Cravioto apoye, sin violentar la libertad electoral, la candidatura del joven Benito [M.] Dorantes para presidente municipal de Tepeji del Río; Dorantes es honrado, laborioso y leal a su gobierno.

3091 / Ms. 1255 / 1881-05-04 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: ZAMACONA, Manuel María de
Queda en espera de los reglamentos de los dos colegios [oficiales] de Estados Unidos y el informe sobre la manera en que los alumnos practican sus respectivos cultos [religiosos]. Desea que se resuelvan las cuentas pendientes entre el secretario de Relaciones Exteriores [Ignacio Mariscal] y Zamacona, se haga justicia a éste y quede en libertad de seguir representando a México cerca del gobierno estadounidense. Le impresionó en forma negativa su informe sobre la orden de desaparecer la nota de [Miguel] Ruelas en que éste protestaba "que no se volvería a incurrir en la imprevisión que marcó los actos del Sr. Mariscal en 1870". Teme que Zamacona siga encerrado en el silencio en relación con la calumnia que le imputó el reporter del Cincinnati Gazette, y que en tal caso sea víctima del rencor y la malevolencia. Con respecto a la situación del país, comenta que hay paz en todo el territorio, los pagos se hacen con regularidad y progresa la construcción de los ferrocarriles central y de Toluca. P.S. Dio a conocer al presidente [Manuel] González la noticia relativa a la nota de Ruelas e hizo resaltar la diferencia que existe entre el ministro de México en Washington y su jefe [Ignacio Mariscal].

3182 / Ms. 1255 / 1881-05-25 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: ZAMACONA, Manuel María de
Responde los puntos indicados en las cartas de Zamacona del 18 de abril, 4 y 8 de mayo. Ofrece recomendar con el presidente [Manuel González] que la señorita Francisca Ramírez obtenga un subsidio de 150 pesos para permanecer tres meses más en Estados Unidos para perfeccionarse en el sistema de enseñanza llamado Kindergarten. Se muestra complacido porque El Heraldo rectificó la injusta e inconveniente calificación de los ministros mexicanos en Estados Unidos, atribuida a Zamacona por el reportero del Cincinnatti Gazette; pero le habría complacido más que Zamacona mandara una rectificación a dicho periódico. En cuanto al Gral. Ulysses S. Grant, aprueba el aviso sobre la marcada diferencia entre éste y una porción de sus partidarios, los cuales son conocidos en aquel país con el nombre de partido grantista. Por último, comenta que en México hay paz; se pagan con regularidad las listas civil y militar; prosiguen con afán las mejoras materiales y el gobierno prefiere la administración a la política. "¡Ojalá, mi querido amigo, que haya sonado la hora postrera de nuestras locuras, de nuestros escándalos y de nuestros crímenes; y que sólo pensemos en consolidar la paz, en restablecer el orden y en administrar la cosa pública con fuerza y estricta moralidad!".

3370 / Ms. 1255 / 1881-06-25 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: MARTÍNEZ CÁCERES, Arturo
Puso en conocimiento del presidente [Manuel González] la cuestión relativa al gobernador [Simón] Cravioto. Asimismo, indicó al primero que la conducta de Martínez Cáceres merece toda su aprobación; por consiguiente, seguirá cumpliendo su deber sin respetos humanos. En relación con esto, recuerda las palabras de Alfonso X el Sabio: "los omes que officio tienen, maguer fagan derecho, non puede ser que non ganen malquerientes" (ley 11, lib. 1º, parte 7ª). Reitera que la viuda de Merced Chávez [Alejandra Vega] debe ser quien acuse al homicida de su marido [Silviano Gómez]; Martínez Cáceres no lo hará hasta estar seguro de que la viuda no puede hacerlo. Solicita que en tiempo oportuno promueva el castigo de Jerónimo González, por calumniar a Montes al afirmar que éste ordenó a Alejandro García escribir a Antonio Barquera para buscar testigos que declararan en contra de [Francisco] Limón y contra los demás monederos falsos; además que escribió a Miguel F. Otáñez con el mismo propósito. Martínez Cáceres debe llamar la atención al juez sobre el hecho de que la declaración de Otáñez favorece a los presuntos reos; tal declaración revela la falsedad y calumnia de González, las cuales no deben quedar sin castigo. Finalmente pregunta: "¿Es por ventura el Srio. de Justicia palillo de dientes de los monederos falsos y de sus cómplices?"

3378 / Ms. 1255 / 1881-06-27 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: MARTÍNEZ CÁCERES, Arturo
Queda enterado que el jefe político de Huichapan se quejó amargamente de Martínez y que éste está resuelto a proceder en su contra. También queda impuesto del consejo que le pide sobre la conducta a seguir en el caso de Silviano Gómez, por disponer de las rentas federales en aquella ciudad. Si Villagrán, jefe político de Huichapan, faltó a la verdad, Martínez debe pedir su castigo por calumniador; cita dos versos de [Quinto] Horacio [Flaco] para que los aplique [Epodon], Liber V, Oda VI, versos 11-12. La regla establecida por los autores del Derecho de gentes es la siguiente: "Debe ser obedecido el gobierno que ejerce el poder; y debe serlo doblemente, cuando su origen es legítimo". Con esto explica que si el ministro de Hacienda autorizó al gobernador del estado de Hidalgo para disponer de las rentas federales en 1876, y si el gobernador autorizó a Gómez para disponer de la renta del timbre en el distrito de Huichapan, entonces Gómez no incurrió en responsabilidad, pero sí está obligado a rendir cuenta justificada de la inversión que hizo. Si no la comprueba, deben aplicársele las penas decretadas en las leyes, especialmente la ley del timbre vigente en 1876. Por último, pide a Martínez decir la verdad al presidente [Manuel González]: que ejerce su ministerio fiscal con absoluta libertad; que Montes no lo aconseja a proceder de tal o cual manera contra los monederos falsos y sus cómplices. Esta declaración es necesaria porque los presuntos reos y cómplices piensan que su situación es obra de Montes y del juez de distrito.

3383 / Ms. 1255 / 1881-06-28 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: MARTÍNEZ CÁCERES, Arturo
El gobernador del estado de Hidalgo [Simón Cravioto] está disgustado por la conducta de Martínez Cáceres para con los poderes de dicho estado. Él no comprende por qué contravino las instrucciones que le dio verbalmente de marchar en armonía con los poderes públicos del estado, y especialmente con el Ejecutivo, y que no les suscitara dificultades, si no era en el caso de que sus deberes lo forzaran a ello, porque la misión de la justicia federal es la incolumidad o preferencia de la Constitución a todas las providencias de cualquier origen y naturaleza. Espera que el gobernador no vuelva a tener motivo de disgusto. Reitera que desprecie la calumnia de los monederos, relativa a que contaron con la anuencia del Gral. Rafael Cravioto, cuando fue gobernador del estado, para acuñar moneda falsa, pues aquél mandó al coronel [Mónico] Valdés a Tecozautla para descubrir la fábrica y diera parte al juez de distrito de lo que descubrió. Valdés declaró que Silviano Gómez introdujo en Huichapan los instrumentos de la amonedación y que también era quien explotaba la fábrica.

3496 / Ms. 1256 / 1881-07-18 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: TORRES TORIJA, Eduardo
A pesar de la buena opinión que tiene Torres Torija sobre el jefe de la fuerza federal, solicita que no omita diligencia alguna para evitar la fuga de los monederos falsos y sus cómplices, pues causaría graves males al estado de Hidalgo y en especial al distrito de Huichapan, donde ejerce un dominio despótico el facineroso [Silviano] Gómez. Espera que le informe sobre la calumnia con que dicho malhechor lo agravió. En cuanto a Nicandro Morales, decidió no contestar su carta porque no quiere entenderse con el instrumento de los presuntos reos de amonedación falsa. El homicida alevoso Gómez lo amenza de muerte teniendo la audacia de enviar un mensajero para pedir su libertad, amenazando primero y suplicando después. Sobre este hecho expresa lo siguiente: "¿U. ha visto un estúpido igual a este bandido? ¡Creer que un proceso pendiente pueda cortarse al arbitrio del secretario de Justicia! se necesita ser una pasta de bestialidad y de ignorancia para pensar tal cosa, ¿y qué diré a U. de la estupidez de este hombre, que piensa amedrentarme con amenazas, después de 32 años que cuento en mi vida pública? No falté a mis deberes ante las bayonetas, la cárcel y el destierro del imperio. ¿Cómo podría faltar a ellos ante las amenazas de un canalla tan vil y despreciable como este asesino?".

3707 / Ms. 1256 / 1881-08-26 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: TORRES TORIJA, Eduardo
Alguno de los monederos falsos acusa al promotor fiscal [Arturo Martínez Cáceres] de suplantar, en la ciudad de México, la declaración del testigo Ausencio Trejo [y Ocampo]. Dicha acusación es una calumnia por las siguientes razones: Ausencio Trejo, autor de la carta que sirve de sustento a la acusación, es hijo de Sixto Trejo y Micaela Ocampo y no fue examinado como testigo; Ausencio Trejo, examinado como testigo por el Juzgado 1º de distrito de México, es hijo de Román Trejo y Benigna Morán. En Pachuca pueden declarar sobre su identidad, Jesús Rojas, sereno en dicha ciudad, y la esposa de éste, Leónides Martínez. También lo conoce Juan Trejo, de oficio cardador, que vive en la casa de Jesús Rojo. Así pues, hay tres testigos que podrán declarar la identidad de Ausencio Trejo. En suma, el autor de la carta es Ausencio Trejo y Ocampo; el testigo examinado es Ausencio Trejo y Morán. Exhortará al Juzgado 1º de distrito a que quede bien probada la identidad de Ausencio Trejo y Morán.

3918 / Ms.1257 / 1881-10-12 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: FUENTES, Vicente
Aunque no sabe a quién se dirige, porque Fuentes usurpa un nombre que no es el suyo, el respeto que debe a la justicia lo obliga a refutar varios errores en que aquél incurrió en carta del 22 de septiembre. En primer lugar, la calumnia contra los Gabriel y Emilio Islas al afirmar que obtuvieron sus títulos profesionales por medio de las liviandades de sus hermanas y que Emilio se vale de "todo género de picardías" para enriquecerse, tal como la de volver loco al doctor Schultz. En forma tajante asegura que los Islas obtuvieron sus títulos de abogado con total arreglo a la ley. Eduardo Islas defendió a Schultz y sostuvo que estaba en su entero juicio, cuando Refugio Rincón Gallardo, su mujer legítima, pidió a la justicia la interdicción legal de su marido. Pretende que remueva a Emilio Islas como juez federal, lo que demuestra su ignorancia de las leyes, pues ningún juez o magistrado puede ser removido sin causa justificada en el juicio respectivo (art. 47 de la Ley Juárez del 23 de noviembre de 1855 y art. 3º del decreto del 1º de junio de 1878). Asimismo, Fuentes censura al juez de distrito del estado de Hidalgo, Eduardo Torres Torija [que conoce del juicio contra los monederos falsos], debido a que es intimidado por los criminales Silviano Gómez y socios por medio de una recusación. Dichos reos usaron el derecho que les concede el art. 28 de la ley del 22 de mayo de 1834 y aquel juez cumplió con su deber al darse por recusado. También ataca al promotor Arturo Martínez Cáceres sin ningún fundamento. En fin, cuando Fuentes quiera ayudar a la buena administración de justicia, debe respetar la verdad y tener el valor de opinar con su verdadero nombre, sin ocultarse bajo un seudónimo. Esta circunstancia "me obliga a usar un lenguaje que no acostumbro emplear en mi correspondencia particular".

3919 / Ms.1257 / 1881-10-12 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: ISLAS ALVARADO, Gabriel María
Hoy envía al seudónimo Vicente Fuentes la carta que copia a continuación [véase núm. 3918]. Espera que la misma lo restituya a su calma habitual, la cual no debió perder por las calumnias de un cobarde que se oculta bajo el velo de la falsedad para herir a mansalva.

3953 / Ms. 1257 / 1881-10-20 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: FUENTES, Vicente
Tiene a la vista la carta de V[icente] Fuentes del 18 de octubre, en la que contesta a la suya de 12 del mismo mes [véase núm. 3918]. Ante su declaración relativa a que ignoraba los puntos referidos en la carta de Montes y en que le pide distinguir entre los calumniadores y los hombres honrados, expresa que el lenguaje que utilizó fue porque pensó que se dirigía a un seudónimo. No debe tenerse por aludido, pues no tuvo la intención de herir su susceptibilidad, ni la de ninguna persona honrada.

4043 / Ms. 1257 / 1881-11-08 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: GONZÁLEZ, Manuel
En calidad de ministro de Justicia, informa los pormenores del caso de amonedación falsa en el distrito de Huichapan, así como los antecedentes criminales de Silviano Gómez, jefe de los monederos, y de su cómplice Francisco Limón, jefe político de aquel distrito. Al comenzar el proceso, parecía que el gobierno del estado [de Hidalgo, a la cabeza de Simón Cravioto] estaba inclinado a que la justicia desempeñara libremente sus funciones, ahora dispensa protección a los presuntos reos permitiéndoles andar en libertad en Pachuca y recomienda su causa a la justicia federal para que queden absueltos. Sospecha que el gobernador lo calumnia ante el presidente, pintándolo como apasionado en contra de los procesados. Informa, entre otros detalles, que los testigos Santiago Martínez e Ildefonso Estrella, después de declarar fueron conducidos al cuartel de la fuerza de seguridad pública del estado, por el jefe de la misma, Cenobio Alarcón. Éste golpeó a Martínez y llevó a ambos a la hacienda del Astillero, después fueron conducidos de Pachuca a Veracruz y de ahí a Yucatán. Sobre los antecedentes de Gómez, platero y coronel del Ejército permanente, en abril de 1867 dio muerte con alevosía a un oficial de rancho en el Sitio de Querétaro; en julio de 1868, mató a Mariano Jiménez; en enero de 1879 dio muerte al capitán Rafael Escalona en Huichapan; en 1876, siendo jefe político de ese distrito, mandó fusilar a un muchacho conocido como "el Loco", y en noviembre del mismo año, mató al comandante Merced Chávez, cuando estaba en estado de parlamento con el Gral. Joaquín Martínez, jefe de brigada que intimó a rendición a la plaza de Huichapan. Todos estos crímenes alevosos quedaron impunes. En 1879 y 1880, fabricaban moneda falsa en Huichapan y Zimapán; en 1880, se establecieron en Tecozautla. El coronel Mónico Valdés fue comisionado para averiguar la verdad de este asunto y aprehendió un volante y otros instrumentos; declaró lo descubierto ante el juez de distrito del estado de Hidalgo: los responsables eran, entre otros, el alcalde municipal de Tecozautla, Ausencio Segovia, Gumersindo Corchado y Silviano Gómez. En la sumaria correspondiente resultó que el jefe político de Huichapan, Francisco Limón, conocía la existencia de la fábrica y es procesado por el juez federal. En el curso del proceso, Limón fue acusado de mandar aplicar la pena de muerte a varias personas sin formarles juicio. Ha sido jefe político en dos distritos de Puebla, en tres del Estado de México y en dos del de Hidalgo; en los distritos de Texcoco, Tenancingo y Huichapan mandó fusilar a varias personas sin formación de causa. El juez propietario dejó de conocer de la causa por haber sido recusado y el conocimiento de la misma pasó al juez 2º suplente, Emilio Islas, con el cual el secretario de Justicia no tiene correspondencia y por consiguiente aquél ejerce su jurisdicción con absoluta independencia. Con el juez propietario [Eduardo Torres Torija] sí tiene correspondencia, pero respetando la independencia del Poder Judicial. Nunca ha dado instrucciones al promotor fiscal del Juzgado de distrito de Hidalgo [Arturo Martínez Cáceres] para suscitar dificultades al gobierno local. Por consiguiente, toda denuncia en contra de su conducta es calumniosa. Espera que el presidente, en vista de este informe, le hará la justicia que merece y que cree tener.

4099 / Ms.1257 / 1881-11-25 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: MONTES LEDESMA, Dolores
Desmiente las noticias [no las menciona] que algunas personas esparcen en Huichapan. Dolores no debe preocuparse pues nadie puede impedir que cada quien diga lo que quiera. Debido a sus enfermedades no puede ayudar a [Jesús] Barranco. No irá a Taxhidó porque no puede montar a caballo, ni viajar en coche. Envía un billete de 20 pesos para sus gastos del mes de diciembre. Agradece, por último, la felicitación con motivo de su natalicio.

4329 / Ms. 1257 / 1882-01-29 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: CARMONA, Jorge
Comenzó a realizar sus encargos con la diligencia debida. Procede con la mayor reserva porque Carmona tiene enemigos poderosos que pueden privarlo de su débil cooperación, a fin de que se vindique de las calumnias que pretenden manchar su nombre.

4462 / Ms. 1257 / 1882-03-16 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: CARMONA, Jorge
Uno de los ministros de Estado es enemigo de Carmona. Tal vez el origen de esto son las calumnias que alguien le comunicó desde París y, sobre todo, la posición de Carmona debida a su cuantiosa fortuna. Considera injusto que piense que es indiferente a sus negocios, pues el año anterior lo salvó de un golpe mortal preparado en su contra. Si cambia de nacionalidad sus cuantiosos intereses en México sufrirán detrimento. Está seguro que su inocencia triunfará sobre las calumnias; por ello aconseja que escriba su vindicación al presidente [Manuel González] y si es favorable la sentencia en el proceso que sigue contra Hans, también le envíe una copia. Pide que tranquilice a su representante [Diego] Falgar, porque piensa que Montes es su sucesor y esto no es cierto.

4540 / Ms. 1257 / 1882-04-14 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: CARMONA, Jorge
Le sorprendió el anuncio de que regresará a México, porque en cartas anteriores expresó el propósito de permanecer indefinidamente en Europa. [Diego] Falgar le consultó la conveniencia de que algunos periódicos de esta capital [México], escriban contra las calumnias que el Henry IV publicó en París contra Carmona. No debe hacerse, porque la prensa de México ya lo ha dejado en paz y no es cuerdo provocar una discusión en que no faltarán los envidiosos que vuelvan a atacarlo. La mejor defensa contra las difamaciones interesadas de los periódicos es el desprecio. Desde el 1º de abril volvió a la vida privada porque sus enfermedades se agravaron; su situación es difícil; pobre entró al Ministerio [de Justicia] y pobre salió de él. Por consiguiente, solicita que ordene a Falgar que le ministre las cantidades que solicite.

4658 / Ms.1258 / 1882-08-16 [Ver ficha completa][Ver documento]
De: MONTES LEDESMA, Ezequiel  Para: CARMONA, Jorge
Le causó placer la noticia que le dio en carta del 20 de julio, concerniente a su triunfo sobre sus calumniadores. Agradece la buena acogida que hace a su recomendación relativa a su hijo Agustín. Las ciudades de México y León han quedado unidas por el ferrocarril central, el cual pronto unirá a Paso del Norte con la ciudad de Chihuahua.